A lo largo de tres décadas Guy Ribes ha conseguido colocar sus cuadros por todo el mundo. Lo llamativo de esto es que nunca firma con su nombre, si no con el de los grandes nombres como Picasso, Degas, Manet, Matisse, Léger, Braque... Otra singularidad al respecto es que no falsifica obras ya existentes, si no que crea pastiches, obras que imitan las formas y las maneras de esos pintores, para luego hacerlos pasar por obras inéditas y colocarlas a un precio bien lucrativo. Esa vida rocambolesca le ha hecho ganar dinero a la vez que le puso en el punto de mira de la policía.
Guy Ribes |