Todo un hombre

Texas, 1885. Enrique, un orgulloso bandido, llega a un pueblo donde su sheriff, John Brown, le encanta citar las sagradas escrituras. Pronto empieza a jugar al póker con un joven jugador moreno, y cuando le sorprende haciendo trampas, debe dispararle en defensa propia. A bordo de un tren que se dirige a Galvbeston, Kid conoce a un hombre llamado Thacker que, al ver que habla un poco de español, le hace una propuesta. Le explica a Kid que una rica aristócrata, la señora Ibarra, tenía un único hijo que se escapó de casa cuando tenía diez años. La mujer le ha ofrecido una buena recompensa para que encuentre al chico y le ha indicado que luce un extraño tatuaje en la muñeca.

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