A Mario, un joven de modesta procedencia que lleva varios años trabajando en Marruecos, en una empresa española, se le acaba de presentar la tan ansiada oportunidad de regresas a España para desempeñar un cargo mejor remunerado. Sin embargo, el destino teje redes invisibles, detalles sin importancia, aparentemente inconexos pero capaces de formar una trampa de la que es imposible escapar : el día antes de su partida. Mario recibe un mensaje de su poderoso jefe, en el que pide que cuide a su hija, que va a realizar un viaje de vacaciones a Marruecos. Lo que parece un asunto sin importancia pronto empieza a cobrar visos de pesadilla, una pesadilla macabra de la que Mario no va a poder despertarse por mucho que lo intente. Laura desaparece como por arte de magia, una adolescente bella y rica, perdida en un país desconocido. Pero esto sólo es el comienzo de la pesadilla para Mario, ya que las únicas huellas de la desaparición le señalan a él como responsable. La Policía marroquí, los padres de la chica, todos culpan a Mario. Y éste no puede demostrar lo contrario, pese a saberse inocente. Victor, un hombre peligroso cuando se lo propone, le emplaza a que le devuelva a su hija, o lo lamentará. Así pues, forzado a encontrar a la muchacha, emprende la búsqueda por todo el país, acompañado de Brahim, un marroquí que dice tener una pista, que aunque incierta, es la única. Este intento de encontrar una solución lógica a su pesadilla, sólo lo empeora. Mario se interna por los lugares más áridos del país, al tiempo que recorre las páginas más amargas de su pasado.