Sebastiano Procolo es un protocolo retirado y a quien la inactividad ha provocado que sus viejas ambiciones se estanquen y le hayan provocado una pérdida de interés y afecto por ninguna cosa del mundo. Se ha convertido en un hombre incapaz de soñar. Recientemente ha cerrado un buen negocio y se ha hecho con el Bosque Viejo, vigilado por el joven Benvenuto. Lejos de gestionarlo para su preservación, Procolo se propone talarlo por completo y así obtener una gran suma de dinero de la madera.
Debido a una enfermedad que Benvenuto, Procolo deberá adentrarse en el bosque para asegurarse que todo marcha bien. Es así como tomará contacto con las misteriosas presencias invisibles que lo pueblan.