Atilano es oficial de servicios funerarios. Su falta de inquietudes sociales y su carácter descreído le convierten en el candidato idóneo para un grupo de banqueros que necesitan una imagen pública con la que negociar durante las elecciones. La acción se desarrolla a lo largo de los veintiún días que dura la campaña electoral de unas hipotéticas elecciones que se celebrarán un 28 de febrero de un año cualquiera.