Rara es la película en la que no se encuentran errores. Los más comunes son los llamados errores de racord, que son aquellos en los que entre toma y toma varía algún aspecto de la escena, como la posición de un objeto o de un personaje. Pero también hay errores más graves como objetos ajenos a las películas que se cuelan en las escenas o fallos de secundarios que pasan desapercibidos.
El filme épico protagonizado por el carismático Mel Gibson también cuenta con errores de bulto. En este caso, podemos ver tres de ellos.
En primer lugar, un hombre con gorra, probablemente del equipo de rodaje, se cruza por detrás durante una escena.
En segundo lugar, detrás de otra escena aparece un coche blanco, que obviamente no podía estar allí.
Por último, nos encontramos con la evidencia de que los objetos utilizados para reproducir armas están hechos de plástico, como se aprecia en la última escena en la que al correr, la lanza se dobla como si fuera de goma.
